Hace un tiempo que no escribía, la verdad es que no tenía inspiración para hacerlo, pero hoy he caído en ese maldito análisis del que siempre hablo, la búsqueda del porque de algunas cosas, y por más que busco respuestas, no las encuentro, y me desgasto en eso.
No quiero hablar o profundizar mucho en eso, pero hoy me di cuenta de algo. Mucha gente habla de lo beneficiados que somos los profesores; en primer lugar por nuestras vacaciones, claro es la raja tener vacaciones de invierno, y los dos meses de vacaciones de verano, pero de que nos sirve eso si nuestros sueldos son bastante bajos, por no decir malos. Cambiaria mucho del tiempo de nuestras vacaciones por una mejor remuneración. Sin caer en un análisis político, nuestro trabajo si bien es muy gratificante, a la vez es estresante, y nadie valora eso, no importando el gobierno de turno, la labor de docente nunca ha sido valorada como debe ser. No han analizado nunca que en nuestras manos esta la formación valórica de nuestros pequeños. En muchas ocasiones somos más que profesores, en algunos casos hay pequeños que ven una figura paterna en nosotros más que en sus propios progenitores. Algunas personas a lo mejor no comparten conmigo lo de formación de valores, pero yo que lo veo desde la perspectiva pedagógica puedo decir que es muy cierto, porque en muchos hogares no existe ni siquiera un pequeño interés de parte de los padres en entregarle a sus hijos lo mas mínimo de valores.
Si las condiciones de trabajo y remuneración cambiaran seria todo tan distinto, trabajaríamos con mucho más ímpetu, y nuestra educación seria muy distinta. Lamentablemente por ser un país tercermundista y nosotros unos mediocres, no somos capaces de crear un buen sistema educacional, ¿Y que nos queda? Copiar modelos fracasados de otros países.
No creo ser el único que haga este tipo de análisis, pero hoy me quería revelar contra el sistema, es por eso mi sentimiento de repudio a la gente que trabaja a nivel ministerial y que nunca en sus vidas han hecho clases y han visto la realidad en el aula.
Nos vemos en una próxima entrega….en la bitácora del maestro.